‘Me siento brasileña’, dice la refugiada siria de 12 años que llevó la Antorcha Olímpica

Una refugiada siria de 12 años cuya familia comenzó una nueva vida en Sao Paulo dijo que se siente brasileña tras cargar este martes (3 de mayo) la llama Olímpica en el primer día del Relevo de la Antorcha Rio 2016.
Hanan Khaled Daqqah rindió tributo al país que le dio la bienvenida junto a su familia luego de huir de la guerra y afincarse en la ciudad más grande de Brasil. “Estaba tan feliz de llevar la Antorcha Olímpica porque nunca me imaginé que eso podría pasar”, dijo.
“Fue un momento muy especial. Amo al pueblo brasileño, yo misma me siento brasileña”, agregó. A una pregunta sobre si tenía un mensaje para los refugiados, Hanan respondió: “Deseo que todos ellos puedan vivir en paz sin guerras y con sus amigos”.
La familia de Daqqah dejó su hogar en Idlib, en el noroeste de Siria, después de que su padre fuera detenido y amenazado por ayudar a sus amigos a escapar del país azotado por la guerra.
Tras vivir dos años y medio en el campo de refugiados de Zaatari en Jordania, su familia comenzó en el 2015 una nueva vida en Sao Paulo, bajo un programa humanitario del Gobierno brasileño. El Gobierno dijo que cerca de 8.000 visas especiales han sido emitidas para sirios bajo la iniciativa. Hanan Khaled Daqqah
Hanan vive con sus padres, un hermano mayor y una hermana pequeña, además de con sus tíos y cuatro primos, en un pequeño departamento. Su madre está embarazada, por lo que Hanan tendrá pronto un hermano nacido en Brasil. Completamente integrada a la vida brasileña, Hanan estudia en una escuela pública cerca de su hogar, habla un portugués fluido y tiene muchos amigos brasileños.
Otro refugiado sirio –el nadador Ibrahim Al-Hussein, quien perdió parte de una pierna por una bomba– llevó la antorcha de Rio 2016 en un campo de refugiados en Atenas la semana pasada.
El Comité Olímpico Internacional está preparando un equipo de refugiados para que compitan bajo la bandera Olímpica en los Juegos Rio 2016. Hanan fue escogida por Rio 2016 a recomendación del Alto Comité de las Naciones Unidas para los Refugiados en Brasil.
El presidente del Comité Nacional para los Refugiados de Brasil, Beto Vasconcelos, dijo: “Los Juegos Olímpicos son un evento internacional que representan unidad, solidaridad, respecto y paz entre las personas. Por eso es una oportunidad para llamar la atención del triste drama humano de la peor crisis humanitaria en 70 años”.

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