La industria del béisbol de las Grandes Ligas en la República Dominicana, continúa forjando el “Julio 2” millonarios a los 16 años. En este primer jalón más de 50 prospectos cambiaron ellos y su familia su status de vida.
A estos niños, porque son unos niños, que entiendan que apenas están gateando, que han dado el primer paso, que el camino a recorrer es muy largo para lograr consagrarse en las Grandes Ligas.
Tomen esos bonos, como sin los casos de Wander Franco, US$ 3.825; Jelfry Marte, $3.0; Rony Mauricio, $2.1; Luis García, $2.5, como un premio, como una bendición divina por sus condiciones atléticas, pero recuerden que lo importante no es firmar, es llegar y consagrarse. Es llegar y mantenerse.
Las organizaciones de liga grande, los escuchas, padres y familiares orienten con sanos consejos esos niños que tienen un gran reto que cumplir, por lo tanto, mucha prudencia en el manejo de los dolaritos y por Dios no se “aloquen” que la vida continúa su agitado curso.