El velerista Deury Corniel, quien en la noche del miércoles recibió el premio de Atleta del Año en la “Gran Gala Olímpica 2019” del Comité Olímpico Dominicano, vio en este reconocimiento el reflejo del sueño que persigue desde la niñez, “ser alguien en la vida”.
Corniel tuvo un año 2018 lleno de logros, entre ellos el tercer lugar en los campeonatos en Turquía, Marruecos y Brasil, que le valió para quedar como subcampeón de la categoría élite en la modalidad Kiteboard IKA Twin tip Racing, misma en la que se coronó campeón en los Juegos Olímpicos de la Juventud celebrados en Argentina.
Este resultado no fue por pura casualidad o por obra del destino, sino el fruto de un arduo trabajo, “para mí el 2018 fue un año muy difícil, pero empecé a entrenarme desde las cinco de la mañana. Yo quería ser alguien en la vida y entonces fui tras esta medalla de oro”, explicó el medallista olímpico juvenil al hablar con la prensa luego de recibir su premio como Atleta del Año.
“Me esforcé en entrenar más todos los días y sin parar”, continuó Corniel, quien recordó las precariedades con las que ha tenido que luchar para alcanzar el éxito que hoy le acompaña, “vivía en la montaña, yo crecí con las vacas, ordeñaba, me comía el afrecho de la vaca cuando tenía hambre. Hacia muchas cosas con la ayuda de mi papá, pero desde pequeño supe lo que quería hacer de grande”.
Corniel, quien llegó desde Italia la noche del pasado martes, reveló que no se espera ganar esta distinción, la cual le constituye en premio metálico de un millón de pesos, los cuales según declaró invertirá en la construcción de una casa.
El campeón olímpico, quien dedicó este premio al pueblo dominicano, tiene previsto regresar a Italia donde recogerá su nuevo equipo, el cual utilizará en su preparación para su primera competencia del año, programa para el mes de abril en Francia.
