Vashti Cunningham, saltadora prodigio

La nueva estrella del atletismo nortamericano, Vashti Cunningham, apenas tiene 18 años años de edad.
Esta impresionante atleta mide 1,85 metros y pesa 66 kilos. Ganó el campeonato de Estados Unidos en pista cubierta con un salto de 1,99 metros, obteniendo el récord mundial junior bajo techo. Las únicas que se acercan a esta marca son Ruth Beitia y Barbados Akela Jones, ambas con 1,98 metros.
Su padre, Randall Cunninghan, famoso quarterback, piensa que Vashti debería probar saltar más de 2 metros, pero ante la negativa de su hija aseguró que “no hay problema, no hay que acelerar un futuro que seguro llegará”.
Randall, junto a su esposa Felicity, instaló en el sótano de su casa un gimnasio especial de saltadores de altura para sus hijos Randall y Vashti.

Ninguna altura parece insuperable para la increíble Vashti, que el sábado, en la misma cancha del Mundial, ganó el campeonato de Estados Unidos en pista cubierta con un salto de 1,99 metros, récord mundial júnior bajo techo. Saltó una altura con la que ninguna otra atleta ha podido este invierno (Beitia ha llegado a 1,98m, al igual que la saltadora de Barbados Akela Jones,de 20 años) con tal holgura que su padre y entrenador, el famoso quarterback de la década pasada Randall Cunningham, desde la grada le señaló que como le había sobrado un buen palmo debería probar saltar más de 2m. Pero su hija, estudiante de último año en un instituto de Las Vegas, le dijo que no. Y su padre, estrella de los Eagles, los Vikings, los Cowboys y los Ravens en una carrera en la NFL de casi 20 años, dijo OK, no hay problema, no hay que acelerar un futuro que seguro llegará. Y nadie lo duda, y menos que nadie la prensa norteamericana, que, admirativa al máximo, la califica aventurada y unánimemente de futuro y pasado del salto de altura mundial. No es coincidencia, evidentemente, que el mismo día del deslumbramiento y las bocas abiertas por Vashti, en la sección de breves de los periódicos deportivos se informaba de la muerte de Iolanda Balas, la rumana de Timisoara y musa verdadera del salto de altura entre 1956 y 1967, una atleta capaz de saltar 1,91m usando su versión particular de la anticuada técnica de tijera.