La Liga Nacional de Promesas (PNLF) llegará a su tercera temporada cargada con gran peso de convertirse en la entidad generadora de prospectos que mañana representen al país en la Selección Nacional de mayores y pisar playas extranjeras como embajadores del buen nivel futbolístico mundial.
Su gestor el español Roberto Díaz tiene más que claro el rumbo de la principal liga de fútbol del país: llenarse con equipos de la geografía nacional, para crear las bases de un espacio más que competitivo de cientos de niños y adolescentes.
“Nosotros somos el modelo del fútbol dominicano, con los más capacitados técnicos y entrenadores, más de una decena con licencias para desarrollar a estos chicos y jóvenes, con una verdadera organización en todos los aspectos”, manifestó Díaz.
El reputado entrenador (es uno de apenas setenta directores técnicos de España) señaló que cuentan con 70 por ciento de los jugadores que pertenecen a las diferentes selecciones nacionales Sub-14, Sub-15, Sub-17 y Sub-20, lo que habla por sí solo del nivel que de la PNLF, donde participan unos mil 150 atletas en masculino y femenil.
“La Promises League es el modelo de trabajo para producir futbolistas al más alto nivel”, y puso como muestra que el programa que dirige en el colegio San Judas (Club Atlético SJ) participó en la Segunda División en 2018 con alto nivel competitivo a pesar de contar con una media de edad hasta 3-4 años menos que los demás clubes del certamen.
“Esta Liga tiene la capacidad de preparación de los entrenadores que la convierte en el primer proyecto para crear futbolistas exportables”. Pero además, cuenta con himno propio en sus jornadas de competencia, “para lo cual pagamos derecho de autor”.
