Ningún equipo de Grandes Ligas ha tenido más éxito en la finca dominicana desde el 2010 como los Nacionales, precisamente el año que comenzaron su reconstrucción tras ser víctimas de un bochornoso escándalo de alteración de documentos protagonizado por Esmailyn González/Carlos Álvarez.
Desde esa primera temporada que el área de desarrollo internacional fue asumida por el domínico-americano Johnny DiPuglia y el monteplatense Fausto Severino hijo el club ha reclutado 13 prospectos que han alcanzado el Big Show, uno más que los Astros. Equipos como Orioles, White Sox, Cerveceros y Bravos solo han sacado uno en ese trayecto.
Se trata de Wilmer Difó, Pedro Severino y Wander Suero (firmados en 2010), José Marmolejos-Díaz, Yermín Mercedes y Raudy Read (2011), Reynaldo López, Rafael Bautista y Jefry Rodríguez (2012), Víctor Robles y Kelvin Gutiérrez (2013), Juan Soto (2015) y Luis García (2016). Unos fichajes que costaron casi US$4 millones, si bien solo Soto y García consiguieron siete dígitos.
García, de 20 años, firmó con etiqueta de no poder fallar (de ahí su enorme bono de US$1,5 millones) y por lo menos ya tiene garantizado un lugar en las efemérides. El lunes se convirtió en el primer jugador nacido en el año 2000 que dispara un jonrón en un partido de la MLB. Y el número 25 entre los dominicanos nacidos en el exterior.
Desde que comenzaron a seguirlo, los ejecutivos de Washington vislumbraron que García sería un jugador a llegar a la Gran Carpa en un breve tiempo y solo ha necesitado tres temporadas y 1,308 apariciones en ligas menores para el equipo protegerlo en roster de 40 dos años antes de lo obligatorio.
Entre mejores 100 del béisbol
Hijo del ex infielder francomacorisano de igual nombre, cuya carrera en el Big Show se limitó a ocho partidos en 1999 con los Tigres (9-1, .111), fue en 2019 cuando sus bonos se dispararon con Baseball America, colocándolo en el puesto 61 en todo el sistema y MLB Pipeline en el 75. Su oportunidad ha llegado a raíz de la lesión de Starlin Castro, para jugar en la segunda base.
