MANCHESTER — “Tengo parálisis cerebral y no me tomo esta enfermedad como un gran problema, sigo adelante”, dice Samuel a sus 11 años.
El chico forma parte del equipo infantil del Manchester United y se ha convertido en inspiración por su espíritu de lucha y entusiasmo.
Sam, como cariñosamente le llaman, juega como portero y utiliza sus rodillas para moverse fuera y dentro de un campo de juego.
Es común que le ofrezcan ayuda, pero él dice que no la necesita, que puede hacer lo mismo que sus compañeros, pues le apasiona el futbol.
Debido al ‘ángel’ que tiene y a que se ha convertido en ejemplo a seguir entre los pequeños que juegan en el Manchester United, así como para los adultos, el club le preparó una sorpresa a Sam.
Los ‘Red Devils’ le brindaron la oportunidad de conocer a sus ídolos: Bastian Schweinsteiger, Ztatan Ibrahimovic, Paul Pogba y David De Gea, entre otros. El guardameta español es su ídolo, debido a que juegan la misma posición.
De Gea le obsequió sus guantes y el rostro de Sam se iluminó igual o tanto cuando vio acercarse a Zlatan y Pogba: “¿Quién es más grande, Paul o yo?”, le preguntó el sueco, a lo que el pequeño no supo responder.
Todos los futbolistas del United abrazaron al niño emocionados. La de Samuel no es una historia más de superación, es una historia donde no hay limitaciones ni barreras.
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